Corgí Pembroke
El Corgi Pembroke es pequeño de tamaño, pero enorme en personalidad. Con sus patitas cortas, su trasero en forma de corazón y esa sonrisa traviesa que lo hace inconfundible, es un perro que conquista a cualquiera.
Originario de los campos de Gales, donde trabajaba como perro pastor, nunca se ha dejado intimidar por su estatura. En su mente sigue siendo un gigante, dispuesto a enfrentarse a lo que haga falta… o a robarte el sofá y el corazón. Su herencia de perro de trabajo se nota en su inteligencia, su carácter decidido y su capacidad de estar siempre alerta.
Pero si algo define a un Corgi es su simpatía. Son sociables, expresivos y les encanta estar en el centro de la acción familiar. Sus orejas puntiagudas y su famoso ladrido de “jefe” dejan claro que siempre quieren dar su opinión. Alegres, juguetones y con mucho sentido del humor, los Corgis llenan de vida cualquier hogar.
